¿Recuerdas hace una década cuando los DVDs venían con la opción de pantalla ancha o pantalla completa?
Seguramente te diste cuenta de que si elegías la opción equivocada, partes de la película se cortaban o el vídeo tenía demasiado relleno negro alrededor.
El tamaño estándar de las pantallas de televisión se estaba ampliando de una relación de anchura y altura de 4:3 a una mucho más amplia. Los productores empezaron a hacer películas que funcionaran en ambas pantallas.
Ahora que las relaciones de aspecto de las pantallas están más estandarizadas, las emisoras y los creadores de contenidos prestan mucha atención a la relación de aspecto del vídeo o a las relaciones de anchura y longitud de sus vídeos.
El audio profesional, las imágenes nítidas, la iluminación perfecta y otras medidas cinematográficas de calidad se suelen tener en cuenta desde el principio, pero las relaciones de aspecto suelen ser una conversación secundaria.
La relación de aspecto de tus vídeos es algo que debes tener en cuenta a la hora de crear y difundir contenidos de vídeo para tu audiencia.
Hoy vamos a desglosar qué son exactamente las relaciones de aspecto del vídeo, las relaciones y resoluciones de vídeo más utilizadas, así como el papel que desempeñan en la transmisión de vídeo en directo.
¿Qué es la relación de aspecto del vídeo?
La relación de aspecto del vídeo es la anchura del vídeo en proporción a la altura. Esta relación describe la anchura de su vídeo
La relación de aspecto del vídeo indica la orientación de un vídeo proporcionando la relación entre la anchura y la altura medida en píxeles.
Los números que aparecen en la relación no son necesariamente representativos de la altura y la anchura en términos de píxeles (px). Es sólo la relación entre la anchura y la altura.
Por ejemplo, un vídeo con una relación de aspecto 16:9 no tendría 16 px de ancho y 9 px de alto. No podrías ver un vídeo tan pequeño. Una resolución que tiene una relación de aspecto de 16:9 es de 1920 px por 1080 px.
Relación de aspecto y resolución
La resolución de vídeo y las relaciones de aspecto desempeñan un papel importante en la producción y difusión de vídeo.
Para cada relación de aspecto hay varias resoluciones equivalentes. La relación de aspecto y la resolución van de la mano.
Para obtener la resolución, hay que multiplicar la anchura por la altura. En cambio, para obtener la relación de aspecto, hay que dividir la anchura por la altura.
Al multiplicar la anchura por la altura, se obtiene el número de píxeles cuadrados de la pantalla. Cuanto mayor sea el número, mejor será la calidad del vídeo.
Puede haber ocasiones en las que optar por una calidad inferior sea la mejor opción. Un vídeo de menor calidad sería beneficioso si necesitas archivos de menor tamaño. En estos casos, grabarías el vídeo con la máxima calidad de transmisión en HD y utilizarías un software de codificación para hacer copias de menor resolución del vídeo.
Relaciones de aspecto más comunes y sus usos
No hay una talla única en lo que respecta a las relaciones de aspecto de los vídeos. Las relaciones de aspecto se eligen normalmente en función del lugar en el que se va a publicar el vídeo, de cómo se va a ver y de la finalidad que tiene.
Los vídeos que se utilizan en las redes sociales varían con respecto a las películas o trailers que se proyectan en los cines. Existen relaciones de aspecto estándar para los televisores modernos, pero las emisoras son libres de utilizar la relación de aspecto que mejor funcione con su contenido y su audiencia.
Dado que la mayoría de los vídeos se emiten a través de plataformas de vídeo online estándar, no se suelen utilizar relaciones de aspecto personalizadas.
Diferentes relaciones de aspecto de vídeo lado a lado para comparar.
A continuación, te presentamos algunas relaciones de aspecto comunes que puedes utilizar para la transmisión en directo y otras creaciones de vídeo:
16:9
Un vídeo con una relación de aspecto 16:9 es un rectángulo ancho. También se suele denominar “1,71:1”, que es la forma más simplificada de la relación, matemáticamente hablando.
Hoy en día, es probable que utilices la relación de aspecto 16:9 para la mayoría de tus creaciones de vídeo y transmisiones, ya que la relación 16:9 se considera el formato estándar internacional para la televisión, el cine y las principales plataformas de transmisión en línea.
Dado que esta relación de aspecto es tan popular, muchos tienden a usarla también cuando transmiten en vivo en sus propios sitios.
El formato 16:9 es la configuración por defecto de la mayoría de los dispositivos de captura de vídeo, tanto profesionales como de consumo. También es el tamaño más común para los reproductores de vídeo.
Hay varias razones por las que el formato 16:9 se ha convertido en la norma. Las pantallas de este tamaño ofrecen una mayor resolución que las que tienen una relación de aspecto de 16:10, que solía considerarse el estándar internacional.
Además, es más rentable crear pantallas compatibles con esta relación que con sus predecesoras. La estandarización tanto de los televisores como de los monitores de ordenador ahorró a los productores tiempo y dinero en el campo de la investigación.
Una de las mejores resoluciones a las que se puede llegar con una relación de aspecto 16:9 es la 4K o 4096 px por 2160 px.
1:1
La relación de aspecto de vídeo 1:1 es un cuadrado perfecto y se utilizaba originalmente en los televisores cuadrados.
Hoy en día, la relación de aspecto 1:1 se utiliza mucho menos. Lo más probable es que lo encuentres en plataformas de redes sociales como Instagram o Facebook.
Aunque no es la relación de aspecto más utilizada, muchas cámaras siguen teniendo una configuración cuadrada.
4:3
Antes de los formatos 16:10 y 16:9, la relación de aspecto 4:3 era el estándar para la televisión tradicional y los monitores de ordenador. La razón del cambio fue el nacimiento de la televisión de alta definición. Las relaciones de aspecto 16:10 y 16:9 permiten mayores resoluciones que las 4:3.
Esta relación de aspecto se siguió utilizando en los iPad de Apple hasta su lanzamiento del iPad Pro de 2018. La relación de aspecto 4:3 está siendo eliminada, por lo que no es muy común.
3:2
La relación de aspecto 3:2 se utilizaba originalmente en la fotografía clásica de 35 mm. Todavía se utiliza en algunos ordenadores portátiles, tabletas y consolas de juegos de mano.
Muchas cámaras de tamaño micro y mediano siguen teniendo la configuración de la relación de aspecto 3:2, pero hoy en día apenas la utilizan las cadenas de televisión.
21:9
La relación de aspecto 21:9 tiene un propósito muy particular. A menudo se denomina pantalla ultra ancha o pantalla ancha cinematográfica.
Se utiliza para las películas con formato anamórfico. Los vídeos con formato anamórfico se utilizan para crear una ilusión óptica que proporciona una visión de 360 grados.
Es probable que encuentres vídeos con esta relación de aspecto en cines especiales, museos, parques temáticos y similares. Están diseñados para ofrecer experiencias más envolventes a los espectadores.
La ilusión que provocan las pantallas de esta dimensión está pensada para que te sientas como si estuvieras dentro del vídeo en lugar de verlo.
9:16
La relación de aspecto 9:16 se utiliza para los vídeos altos. Esta relación de aspecto se popularizó cuando se crearon los smartphones con capacidades de vídeo.
Por ejemplo, la medida óptima para una historia de Instagram es de 1080 px por 1920 px, lo que significa que su relación es de 9:16. Lo mismo ocurre con otras aplicaciones populares que tienen funciones de “historia”, como Facebook y Snapchat.
Esto tiene sentido porque el ajuste de vídeo de la cámara del iPhone puede grabar secuencias tanto en 9:16 como en 16:9.
Cómo saber la relación de aspecto de un vídeo
Tenga en cuenta la experiencia del usuario al elegir una relación de aspecto. Elige una que sea universalmente compatible.
La mayoría de las cámaras con capacidades de vídeo vienen con una variedad de ajustes de relación de aspecto. Esto te permite decidir qué relación de aspecto quieres que tenga tu vídeo antes de grabarlo.
Si quieres saber la relación de aspecto de un vídeo ya grabado, puedes acceder a información adicional del archivo. En los Mac, el botón de información es una pequeña “i” en un círculo. En los PC, haz clic con el botón derecho en un archivo y haz clic en “Propiedades”.
Puede darte la anchura y la altura reales del vídeo, pero puedes dividirlas para encontrar la relación de aspecto.
¿Cuál es la mejor relación de aspecto para un vídeo?
La relación de aspecto más común para los vídeos es 16:9. Sin embargo, esto no significa que sea la mejor relación de aspecto.
La razón por la que es tan popular es que es el estándar para los televisores de alta definición y las plataformas de transmisión populares como Brightcove, Youtube, TikTok o Netflix.
La relación 16:9 suele considerarse óptima porque es capaz de ofrecer la mayor resolución. También es fácil capturar esta relación de aspecto en casi todos los dispositivos.
Para determinar qué relación de aspecto del vídeo es la mejor para su contenido, tenga en cuenta su propósito y dónde va a emitir el vídeo.
Cómo cambiar la relación de aspecto de un vídeo
La configuración correcta de la relación de aspecto del vídeo desempeña un papel importante en la producción y difusión del mismo.
Hay dos maneras de cambiar la relación de aspecto de tu vídeo: añadir barras negras alrededor del vídeo o recortarlo.
Aunque es totalmente posible cambiar la relación de aspecto de tu vídeo después de haberlo filmado, no siempre es recomendable. Esto se debe a que ambos métodos tienen sus desventajas.
Si quieres ir por el camino de recortar tu vídeo, necesitas una herramienta de edición que tenga capacidades de recorte.
Tanto si tu objetivo es hacer el vídeo más alto o más ancho, el recorte podría cortar a personas u objetos importantes fuera del encuadre. Puede que te veas obligado a elegir qué partes del encuadre son las más importantes y perder el resto.
Añadir barras negras como alternativa al recorte de tu vídeo, es genial en el sentido de que mantiene el vídeo completo. ¿El inconveniente? Las barras negras no son necesariamente las más atractivas.
Dependiendo de dónde estés emitiendo el vídeo, tu contenido puede ser editado automáticamente. Youtube, por ejemplo, añade un relleno blanco alrededor del vídeo para que se ajuste a la relación de aspecto 16:9. Sin embargo, otras plataformas de medios sociales recortarán tus vídeos para que se ajusten a su relación de aspecto establecida.
Relaciones de aspecto del vídeo en la transmisión en directo
La relación de aspecto es un factor clave de éxito en su proceso de transmisión en directo, ya que garantizará la calidad de su contenido de vídeo.
Las retransmisiones en directo son complicadas en el sentido de que tienes que calcular la logística antes de filmar, ya que tu audiencia consume el contenido a medida que se crea.
La relación de aspecto del vídeo que elijas para tu transmisión debe seguir el protocolo de transmisión de vídeo, que exige dos cosas: una reproducción universal y un tamaño de archivo pequeño.
Con la relación de aspecto 16:9, puedes tachar ambas cosas. Hay una amplia gama de resoluciones entre las que se puede elegir, por lo que se puede encontrar la resolución óptima en la que confluyan la calidad deseada y el tamaño del archivo.
Básicamente, todos los ordenadores, televisores, dispositivos móviles y reproductores de vídeo pueden reproducir vídeos con una relación de aspecto 16:9, por lo que la reproducción universal también está garantizada.
Cuando emitas en directo, es muy importante que te asegures de que la relación de aspecto del vídeo de tu equipo de grabación es compatible con la plataforma de streaming que elijas. No querrás que se corte nada importante, sobre todo porque no tendrás la posibilidad de volver a grabar el contenido.
Relaciones de aspecto en su creación de vídeo
Las relaciones de aspecto -la relación entre la anchura y la longitud de tu vídeo- son sin duda algo que hay que tener en cuenta a la hora de producir contenidos de vídeo para transmitirlos a tu audiencia.
Aunque la compatibilidad de la relación de aspecto del vídeo y de tu gestor de alojamiento de vídeos o servicio de streaming es de gran importancia, tienes que tener en cuenta la experiencia del usuario.
Piensa en el tipo de dispositivos que tus espectadores utilizarán para ver tus vídeos y toma tu decisión en consecuencia.
Tanto si eliges una relación de aspecto estándar de 16:9 para el contenido que se transmitirá en un ordenador portátil como una relación de 9:16 para el que se transmitirá en un teléfono móvil, asegúrate de que se presenta de forma clara y sin recortes desagradables para que tu audiencia tenga la mejor experiencia.
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